Cupcakes con papá.

Le comenté al encargado de la intendencia que había visto unos paquetes de esos como los de Dr. Oetker, con lo necesario para hacer cupcakes, que parecía que se estaba poniendo muy de moda.
Pues el lunes trajo uno y como no, nuestras hijas quisieron apuntarse a hacerlos. Así que el martes, el padre y ellas se encerraron en la cocina (literalmente), dejándome a mí y al gato fuera...
Y he aquí el resultado:

Son de limón y están ricos, la verdad. La almendra crujiente molida, los fideos de colores y los barquillos no vienen en el paquete, son cosas que teníamos por casa y que usé dando un toque diferente (sí, el remate fue mio, no lo puedo evitar).
Besos.