miércoles, 20 de abril de 2016

Los peques consiguen cosas.

Si tienes hijos probablemente hayas recurrido en alguna ocasión a hacer una tabla de progreso para motivarlos a conseguir algo, cambiar una conducta o establecer una rutina. Es un recurso pedagógico muy común que refuerza comportamientos positivos. Yo la he usado en algunas ocasiones desde que cumplieron los tres años.

Tampoco hay que abusar de ella, pierde eficacia si todo lo establecemos con la tabla porque de tanto ver el recurso se aburren. No usarla  muchas veces seguidas ni durante mucho tiempo, así cuando lo propongas será casi una novedad cada vez.

Lo que queremos conseguir debe ser claro y concreto, como siempre con los niños no valen generalidades como "hay que ser ordenado",  mejor decir "recogemos los juguetes cuando terminamos". Intentemos que las instrucciones estén en positivo, por ejemplo "vamos a comer sano" en lugar de "no más chuches". Y no seamos ambiciosos con los objetivos, es mejor ir poco a poco que frustrarnos (niños y adultos) porque no hemos conseguido lo que nos habíamos propuesto.

Cuando son pequeños se puede usar una tabla tipo recorrido u oca, con un solo objetivo o un par de ellos por día, durante una semana. Cada vez que conseguimos algo avanzamos una casilla (sumamos un punto, conseguimos una pegatina o un cromo...) y vamos consiguiendo pequeños premios diarios. Y para terminar la semana un premio extra, como jugar en familia, ir a ver a los amigos o primos, tomar un helado, etc. También es útil combinar lo que queremos conseguir con otras cosas que ya las tenga conseguidas, por ejemplo si sabe pedir ir al baño y se lava las manos, pero no le gusta lavarse los dientes, podemos combinar las tres conductas para que los éxitos de unas le animen con la que tiene más dificultad.
Aquí les dejo un tablero para trabajar el comer sano, cepillarnos los dientes y bañarnos:



(Con el botón derecho elegir Ver imagen y luego guardar como).
Y aquí el tablero vacío para que hagas tus propios dibujos, o le pongas pegatinas relacionadas con el tema, o ir añadiendo en cada casilla la pegatina conseguida:



Es importante poner el tablero en lugar visible e importante, la nevera es un buen sitio y además nos permite usar imanes como marcadores del recorrido. Cuanto más pequeños sean los niños, más inmediata debe ser la gratificación, así que puedes llevar las pegatinas o los cromos en el bolso y darselo en el momento que ha conseguido lo que queremos, y luego apuntarlo en casa en el tablero. ¡No te olvides! si lo hacemos un día, al siguiente no, luego sí, luego no... no va a funcionar, dale la importancia que tiene y se constante para que ellos también lo sean.

Si son algo mayores podemos usar las tablas de varias casillas semanales, si mantienen el hábito o conducta a lo largo de un mes, ya lo habremos incorporado. Si ya saben leer y escribir, les resulta estimulante poder hacerlo ellos, así que déjalos que colaboren haciendo la tabla.
En el enlace les dejo un archivo editable con un modelo de tabla que pueden usar para escribir las tareas que quieran reforzar y el premio semanal a conseguir:


Luego en las casillas pueden ir poniendo pegatinas de estrellitas o ir dibujando las caritas sonrientes o un poco tristes, para evaluar al final de cada semana, y quedaría algo similar a esto:




 ¿Qué les parece? ¿han usado este recurso alguna vez? ¿ha funcionado o no? Ya me contareis.

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